Los seres humanos hemos intentado por medios espirituales o religiosos, hallar una elevación de la consciencia.
Sabemos que al encontrar un equilibrio de nuestro cuerpo, mente y alma tendríamos la posibilidad de conectarnos a un nivel energético que nos trascienda en vida.
En algunas doctrinas se le llama Iluminación; principalmente el budismo nos propone un método de consciencia suprema, basado en vivir el instante con sabiduría y aceptación del ahora. Es decir, una plena y total aceptación de nuestra vida tal como es, por el simple hecho de que así es. Una práctica conocida por todos es la meditación.
Al ver el mundo con esta claridad, con esta forma de SER, a través del amor absoluto por la vida y el instante, es esta filosofía también la que nos dice que no necesitaríamos buscar algo más allá de lo que tenemos pues sólo deseamos lo que conocemos.
Fíjense cómo el humano en su eterna búsqueda de esta satisfacción etérea, hemos forjado varias religiones con diferentes preceptos y principios pero no hemos logrado unificar ideas.
También cómo en nuestra vastedad de pensamientos y emociones tenemos que hacer un esfuerzo para alcanzar el equilibrio.
Los animales en cambio, viven en sincronía con todo lo que les rodea. Hay quienes piensan que no tienen consciencia de sí o su entorno, que no saben reconocer sentimientos, que no tienen alma, y que por lo tanto no son seres enteros. Pero tengo una teoría que desmitifica esto: Los Animales Meditan.
A mi modo de ver las cosas, los animales no necesitan la idea de un Dios para reconocer su existencia o vivir a través del amor.
Su simplicidad, los hace superiores pues ellos ya han conquistado por simple composición, lo que los humanos trabajamos día a día en nosotros mismos.
Y no sólo los animales, de hecho los niños desde muy pequeñitos tienen esta capacidad de aceptación muy desarrollada pero nuestro código social, los hace insatisfechos.
Así que los animales meditan no para encontrar respuestas o iluminación (al igual que los niños), sino porque al estar ya en calma, la respuesta natural de su mente, cuerpo y alma, es entrar en estado de paz y meditación.
Que si se van al "cielo" o no.... ni siquera nosotros estamos seguros fehacientemente de que los humanos vayan; ésto último no debería ser tema de discusión.
Ojalá me comenten y den sus opiniones. Alguna vez has visto a tu mascota o a algún animal tener esa poderosa energía tan equilibrada como la de un maestro espiritual?
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